José Antonio Ramos Sucre ¿rescatado en el naufragio?
Alfredo Tamayo
C.N.P. N° 14.535
La imagen, que casi tenían en un altar en la Escuela de Letras de la UCV del poeta cumanés José Antonio Ramos Sucre, vuelve renovada a la Feria Internacional del Libro de Venezuela, Filven, en 2025 con el libro La Ruta del Insomne de Carlos Rocha.
Hay muchas perspectivas de ver Ramos Sucre un poeta incomprendido en su tiempo. Figura desconcertante como enigmática de las letras venezolanas.
El poeta William Osuna, quién abrió con sus palabras el evento de presentación del libro, señaló que la Cátedra Ramos Sucre de la Universidad de Salamanca había sido cerrada por lo que invitó a unos representantes del Ministerio de Educación presentes en la Filven, a gestionar la reapertura de la misma.
El profesor Rocha, por su parte, expresó que su intención es pedagógica, para que las nuevas generaciones puedan conocer la obra de Ramos Sucre.

Carmen Helena de Las Casas, musa caraqueña en contraplano
La delicada y hermosa influencia que posiblemente tuvo Carmen Helena de Las Casas en la obra poética de Ramos Sucre, fue motivo de disertación por parte de Carlos Rocha..
Esta dama de la alta sociedad caraqueña estuvo revestida de un aire muy especial para la época. Aparte de lo hermosa, elegante y delicada que era, también fue una mujer de vanguardia. Estudió pintura y viajaba frecuentemente a París para participar en Los Talleres de los artistas impresionistas y postimoresionistas, experiencia que le permitió impregnarse, posiblemente, de las ideas progresistas con respecto a la liberación femenina.
Lamentablemente para José Antonio Ramos Sucre, Carmen Helena de Las Casas no le correspondió a sus cortejos. Pasó del poeta enamorado. De ahí la hipótesis de Carlos Rocha.

Tiempo después, esta musa inspiradora comienza a trabajar con la firma de arquitectos Las Tres L como diseñadora de interiores. Fenómeno exquisitamente novedoso en una sociedad que apenas salía de la larga noche del gomecismo.
Entre los trabajos de diseño que realizó De Las Casas, según relata Rocha en La Ruta del Insomne, fue los interiores del Teatro o Cine Principal adyacente a la Plaza Bolívar de Caracas.
Rocha también destacó que la influencia de esta dama caraqueña no solo se limitó al ámbito personal de Ramos Sucre, sino que también se extendió a su obra literaria, aportando una sensibilidad y una perspectiva únicas que enriquecieron sus escritos. Esta interacción entre ambos artistas refleja un intercambio cultural y emocional que, aunque no culminó en una relación amorosa, dejó una huella indeleble en la producción poética del autor cumanés.
Durante la presentación del libro, se discutió la importancia de revalorizar la figura de Ramos Sucre en el contexto actual, resaltando su capacidad para desafiar las normas literarias de su tiempo y su habilidad para capturar la complejidad de la condición humana en sus textos. La obra de Ramos Sucre, aunque en su momento no fue ampliamente comprendida, hoy se reconoce como un pilar fundamental de la literatura venezolana.
El evento en la Filven 2025, no solo sirvió para rendir homenaje a Ramos Sucre, sino también para fomentar un diálogo sobre la relevancia de su legado en el siglo XXI. Los asistentes, subrayaron la necesidad de mantener viva la memoria y el estudio de autores que, como Ramos Sucre, desafiaron los límites de su época y abrieron nuevos caminos en el ámbito literario.